Una vez que hemos terminado de cortar y secar las plantas de nuestro cultivo exótico, necesitamos ciertos recipientes que nos permitan conservarla adecuadamente, como pueden ser botes y tarros. Pero no nos vale cualquiera, sino que deben tener un cierre hermético.
Después de todo el trabajo que hemos hecho para llegar a este punto, no podemos echarlo todo por tierra por no elegir un bote o tarro que no sea de calidad. Por fortuna, en esta sección puedes encontrar las mejores opciones.
El paso del tiempo, la oxidación del oxígeno, y la acción de ciertos agentes podrían afectar a la composición del resultado de nuestro cultivo. Poco a poco, empezará a degradarse, hasta llegar a un punto en el que tendremos que tirarlo todo.
Para conservar la marihuana, la opción más recomendada es utilizar algún tipo de elemento que tenga cierre hermético. Lo que se consigue con esto es controlar la entrada y la salida de aire a cuando la deseemos.
Durante los 5-10 primeros días en los que introducimos el cannabis en estos botes, se recomienda abrirlos con una frecuencia diaria y dejar que se aireen durante unos 60 minutos. Así evitaremos que las condiciones de humedad del interior sean inadecuadas para su mantenimiento (que, o bien sea demasiado alta o demasiado baja).
Con unas condiciones de humedad inadecuadas podrían proliferar hongos, moho, o podría llegar a secarse tanto que tendríamos que tirarla.
No basta con esto, y es que los botes y tarros deben ser guardados en un lugar fresco, lejos de los rayos del sol.
Conservar el cannabis en botes y tarros no solo mejorará ayudará a que se mantengan sus propiedades, sino que también las puede mejorar.
Está comprobado que una buena conservación, con un sellado hermético, podría contribuir a mejorar las propiedades organolépticas (es decir, tanto el olor, como el sabor).
Pero no solo eso, sino que los elementos cannabinoides de la planta se irán transformando de forma progresiva, potenciando así la calidad de la hierba.
Si la conservamos en botes y tarros herméticos podemos evitar disgustos al emitirse los malos olores al exterior, delatando la presencia de la hierba.
Aquellos usuarios a los que no les entusiasme en demasía la marihuana madura, siempre la pueden congelar. La gran ventaja de hacer esto es que se conseguirá que sus propiedades naturales iniciales se mantengan durante mucho tiempo.
Sin embargo, no deberíamos usar los botes y tarros para ello, a no ser que hayan sido preparados específicamente para este proceso.
En lugar de ello, lo más recomendado es apostar por bolsa o recipientes herméticos que estén concebidos para almacenar la marihuana. Al ser herméticos, podemos estar seguros de que las condiciones de humedad serán óptimas. Al mismo tiempo, no temeremos que el vidrio pueda llegar a reventar, o causar cualquier tipo de estrago.
Ten preparados algunos botes y tarros herméticos para conseguir una buena conservación del producto.
