Las mesas de cultivo se han convertido en toda una tendencia, tanto en cultivadores iniciados, como en aquellos que ya tienen mucha experiencia. Se pueden encontrar en muchos grow shows y/o en tiendas especializadas en cultivos online.
Si no tienes mucho espacio para cultivar, no te quieres complicar demasiado la vida y, aún así, quieres conseguir los mejores resultados, estas mesas pueden ayudarte más de lo que te piensas.
Las mesas de cultivo suponen una revolucionaria forma de cultivar para aquellas personas que tienen el espacio justo en casa. Se adaptan al espacio disponible: podemos encontrar modelos que ocupan más o menos, o en diferentes formas para cubrir rincones o lugares desaprovechados.
Es una buena alternativa para todos aquellos que no tengan espacio para un cultivo, o que quieran crear un cultivo diferente y no mezclarlo con el que ya se tiene.
Lo único que necesitaremos es un patio, terraza y balcón para poder integrarlos.
Uno de los factores clave de las mesas de cultivo es la profundidad: a mayor profundidad, como las raíces tendrán más espacio para crecer, mayor será también el tamaño de la hortaliza, o la atura que esta sea capaz de alcanzar.
Por eso, antes de comprar una mesa de cultivo, es crucial tener claro que es lo que ese quiere cultivar.
No nos hace falta más que un metro cuadrado para conseguir dar forma a cultivos increíbles y a cuantiosas cosechas. Ten en cuenta que te ayudará a esquivar el principal obstáculo, que es la falta de espacio.
Estas son las ventajas de comprar mesas de cultivo:
Resulta mucho más sencillo controlar las condiciones que se dan en una mesa de cultivo, como puede ser el sustrato que se ha añadido, el PH o el EC, la humedad, temperatura, salinidad, estructura, entre otros factores.
Si estamos hablando de un campo abierto, o de un terreno de cultivo bastante amplio, controlar estas condiciones será bastante complicado.
Las mesas de cultivo suelen tener una elevación considerable, y esto nos permite lograr un manejo óptimo. No será necesario que nos agachemos para llevar a cabo las tareas de mantenimiento: podemos comprobar el estado en el que se encuentra la tierra, regar, podar, acabar con las malas tierras, y todo ello sin sufrir problemas de espalda.
Quedará mucho mejor un huerto en una mesa de cultivo. En la misma podemos tener nuestras hortalizas y verduras bien agrupadas; incluso hasta nos puede servir para decorar el espacio.
Con un par de mesas de cultivo podemos crear todo un jardín viviente.
Existen muchos modelos de estas mesas, y tienen precios que se adaptan realmente al bolsillo de cualquier tipo de usuario.
También es posible ahorrar dinero comprando los materiales y fabricando la mesa por nuestra cuenta, aunque requiere de mucho tiempo y habilidad.
Apuesta por estas mesas de cultivo y soluciona los principales problemas a la hora de cultivar en casa.
