La mosca del suelo puede parecernos un insecto inofensivo que poco o nada hará a nuestros cultivos. Antes de darnos cuenta, puede provocar destrozos importantes.
Esta categoría recoge todos aquellos productos que te ayudarán a prevenir cualquier plaga de mosca del suelo, y combatirla si ya ha llegado.
También conocida como la mosca del sustrato, es aquel tipo de insecto que se puede quedar a vivir en nuestro cultivo en el momento en el que las temperaturas son bajas. Esto quiere decir que nunca podremos extremar las precauciones, ya que podría aparecer en cualquier momento.
Su tamaño oscila entre los 3-5mm y debido a su forma y a su color negro, presencia de antenas y patas, podemos pensar que se trata de una mosca normal. De hecho, es muy complicado apreciar las diferencias a simple vista, a no ser que la pasemos por un microscopio.
Si pasamos las manos por nuestro cultivo y empiezan a revolotear muchas de estas moscas, es señal de que los problemas han empezado. En su etapa adulta, la mosca resulta inocua para la cosecha, pero es muy posible que el sustrato esté infestado de huevos (calcula que por cada puesta puede haber en torno a 400 huevos).
Unos de los factores que podría explicar la proliferación de las plantas es una forma ineficiente de regar: podríamos estar regando en exceso, provocando que la humedad relativa del entorno esté disparada.
Los síntomas que delatan la presencia de la mosca del suelo son muy variados:
·Si el sustrato ha quedado comprometido, los nutrientes estarán disponibles en una menor proporción, por lo que podría detenerse el crecimiento de la planta.
·Si las hojas de nuestras plantas están perdiendo fuerza y cambiando de color, también podría ser una señal.
·Pero el verdadero problema de mosca del suelo es que podrían hacer que aparezcan diferentes hongos, como es el caso del Botrytis o del Fusarium. Si esto ocurre, es posible que no podamos hacer nada más por nuestro cultivo, más que acabar con el mismo y empezar de cero.
·Humedad: lo primero que debes hacer es combatir el exceso de humedad del suelo. Usa un termohigrómetro para conocer los valores e inicia cambios ya mismo.
·Temperatura: asegúrate de que tus plantas no estén pasando frío. Consiguiendo la temperatura de confort adecuada nos podemos quitar más de un dolor de cabeza de encima.
·Ventilación: unas buenas condiciones de ventilación también podrían solucionar el problema.
·Desinfección: los productos más recomendados para prevenir o acabar con la mosca blanca son el aceite de neem o el jabón potásico. Pero si esto no funciona, recuerda que en esta parte de la web tienes productos más específicos que te pueden ir muy bien.
·Elimina las hojas afectadas: arranca y quema las hojas que hayan quedado ya afectadas.
Con un poco de paciencia, y con los productos adecuados, ganaremos la batalla a la mosca del suelo.
