Los vaporizadores son recursos muy interesantes para fumar marihuana y aprovecharnos de todas sus propiedades. Es una excelente alternativa al consumo convencional que nos permite evitar la combustión: como ya sabes, esta es perjudicial para nuestra salud, además de hacer que el sabor empeore de una forma característica.
En esta sección podrás encontrar diferentes tipos de vaporizadores, además de subcategorías para cada uno de ellos.
Los vaporizadores de marihuana funcionan emitiendo una determinada cantidad de calor que calentará la hierba hasta que los cannabinoides contenidos en la misma se empiecen a evaporar y extender por el medio.
Dependiendo de la manera de funcionar de los vaporizadores, podemos distinguir entre dos grandes tipos:
·Vaporizador por convección: es aquel tipo de vaporizador en el que la zona en la que se genera el calor no tiene contacto con el cannabis que se quiere vaporizar. En lugar de ello, existen conductos internos que tienen la labor de redirigir las corrientes de aire ascendente hacia la hierba. Al no existir un calentamiento directo de la planta, ni ningún sistema de combustión, este sistema se considera mucho más respetuoso para nuestra salud.
·Vaporizador por conducción: a diferencia del sistema anterior, en este sí que hay contacto entre la zona de calor con la marihuana. Es importante comprar un vaporizador de cannabis de calidad, que caliente el área exacta, ya que solo así se conseguirá una buena calidad de vapor. El vapor irá ascendiendo a través de un conducto y, para evitar cualquier daño a la planta, se refrigerará al mismo tiempo. Este intrincado proceso permite mejorar la calidad del vapor.
El gran problema que tiene consumir marihuana a través de la combustión es que tan solo seremos capaces de absorber un 20% de los cannabinoides de la planta en cuestión. Podemos incrementar este porcentaje hasta llegar al 25% si utilizamos un bong, pero sigue siendo una proporción bastante pobre.
Sin embargo, utilizando un vaporizador, podemos incrementar este porcentaje hasta llegar a un 90%, incluso hasta más.
Al mismo tiempo, a través del sistema que nos ofrece un vaporizador se reducen las sustancias tóxicas que podríamos llegar a ingerir, debido a que no se lleva a cabo el proceso de combustión.
Otra de las interesantes ventajas de los vaporizadores para cannabis es que nos permiten personalizar la experiencia con todo detalle: son aparatos que nos dan la posibilidad de regular la temperatura. De esta forma, podemos obtener el vaporizado de los diferentes cannabinoides, según queramos (como podría ser el caso del CBD o del CBG).
Por ejemplo, en el caso de que queramos aprovecharnos de los beneficios del CBD, que es un componente con una ínfima cantidad de elementos psicotrópicos, tendremos que regular la temperatura del dispositivo en torno a los 170ºC.
Si todavía no has probado el cannabis con un vaporizador, te animamos a hacerlo. En esta sección puedes encontrar los principales tipos, así como algunos de los modelos que están considerados como los mejores del mercado.
